Un edificio sostenible es aquel que es respetuoso con el medio ambiente porque hace un uso correcto de los materiales, el agua y la energía que consume.
Hoy en día, el consumismo y el usar y tirar parecen haberse apoderado de nuestras vidas, sin tener en cuenta el desgaste de los recursos del planeta, que son limitados. Por ello, con la construcción, debemos maximizar el uso de estos recursos asegurándonos de que cada elemento, desde el diseño hasta la ejecución, se optimiza al máximo, reduciendo así la huella de carbón que dejan los edificios y los residuos que generan en su proceso.
Una construcción sostenible debe hacer un uso correcto de los materiales, así como de la energía y el agua, al tiempo que integra criterios sociales que afectan positivamente a la comunidad.
En relación con el concepto Passivhaus, el estándar Passivhaus se refiere a la eficiencia energética del edificio. A través de los cinco puntos del estándar Passivhaus (estanqueidad, aislamiento térmico, ausencia de puentes térmicos, carpintería de alta gama y ventilación controlada con recuperación de calor), se consigue una alta eficiencia energética sin necesidad de utilizar materiales de construcción específicos.
KLARQ, más que casas un estilo de vida.